Acercar sus servicios a las personas que necesitan su apoyo y atención es uno de los objetivos de Hurkoa
En ese contexto, desde este año cuenta con un nuevo espacio en la localidad de Tolosa desde donde poder ayudar a personas mayores o con enfermedad mental en situación de fragilidad, dependencia o desprotección. Esa es la actividad que desarrolla esta fundación, creada con el impulso de Cáritas hace más de 30 años.
Hurkoa disponía de un punto de atención desde el año 2015 en un local cedido por las Hijas de la Caridad. Ahora, el Ayuntamiento de Tolosa ha cedido a Hurkoa un local compartido con otras e entidades sociales para poder contar con un punto de atención a la ciudadanía en el centro de la localidad. Desde esta oficina, se atenderán los casos de Tolosaldea, Goierri y Andoain. La experiencia de estos últimos años -en los que Hurkoa se ha instalado en Arrasate, Irún y Azkoitia- ha permitido comprobar que la cercanía a las personas usuarias, familiares e instituciones de ámbito comarcal o municipal es un factor determinante para la detección y atención a casos existentes de personas necesitadas de apoyo profesional.
Los principales objetivos planteados desde esta nueva sede -explica José Ignacio del Pozo, director gerente de Hurkoa- serán “atender a personas tuteladas y sus familiares, asesoramiento a familias sobre procesos de tutela, reuniones con el voluntariado comarcal, aproximación al tejido asociativo y a las entidades públicas del entorno, etc.”.
Inicialmente, esta oficina estará operativa los jueves de 9:00 a 14:00. Dadas las circunstancias sanitarias actuales, es necesario solicitar cita previa llamando al teléfono 943 468 956. Este punto de atención se encuentra en la calle Emeterio Arrese, 2. En la planta baja se ubica el Club del Jubilado, y en la segunda, donde está Hurkoa, oficinas y locales para diversas asociaciones de Tolosa
Actualmente en las comarcas de Tolosaldea y Goierri se está atendiendo a 34 personas, de las cuales 16 viven en residencias de mayores, 11 en recursos destinados a personas con enfermedad mental y 7 en domicilios. 19 de ellas son menores de 65 años. En cuanto al perfil diagnóstico, hay 11 casos de deterioro cognitivo, 19 de enfermedad mental, 1 de adicciones y 3 de discapacidad intelectual.
Ayudar a todas estas personas requiere una mayor dedicación de personas voluntarias que puedan ofrecer una parte de su tiempo para ayudar a otras personas. En ese sentido, desde Hurkoa se realiza un llamamiento a la captación de voluntariado para poder reforzar y mejorar el servicio que se ofrece en estas comarcas y que solo es posible con la dedicación de las personas voluntarias.