Desde que asumió en 2013 la atención asistencial a los curas de Guipúzcoa, ha logrado optimizar la gestión residencial, elevando la satisfacción de los usuarios a menor coste.
A pesar del aumento de sacerdotes mayores en Guipúzcoa con algún nivel de dependencia, y de la mayor carga de trabajo que supone el incremento de la ocupación que se ha registrado en las residencias del Seminario, de la calle Urdaneta de Donostia y de Irún, Hurkoa ha logrado elevar los ratios de satisfacción de los usuarios de estos centros. Y lo ha hecho gracias al impulso de una gran cantidad de medidas que han derivado en una optimización de toda la gestión, de la que se hizo cargo a comienzos del pasado año.
A punto de cumplirse dos años desde que Hurkoa asumiera la gestión del Programa de Atención a Sacerdotes Mayores de la Diócesis de San Sebastián, mediante un convenio de colaboración con el Obispado, desde la Fundación se hace un balance muy positivo de todo este periodo. Las medidas implantadas desde entonces en los distintos centros residenciales están dando un gran resultado y las aportaciones e implicación de los trabajadores, junto a la colaboración de los propios residentes, están siendo sobresalientes. Todo ello ha derivado en una optimización de recursos, con una gestión más procedimentada y basada en protocolos, y en un aumento de la satisfacción de los residentes, que cuentan con un servicio totalmente individualizado y que han manifestado su agrado con la labor de Hurkoa.
Pero no está siendo una tarea fácil. Las residencias sacerdotales han visto incrementada considerablemente su actividad y carga de trabajo, debido a un mayor nivel de ocupación y el aumento del nivel de dependencia de los usuarios (en el Seminario se ha pasado de albergar casi un 100% de residentes relativamente autónomos a residir poco más de la mitad de forma independiente). De hecho, todo indica que acabará desempeñando una función de centro geriátrico, y deberá adecuarse paulatinamente a esta nueva realidad (especialización del personal, adecuación de medios e instalaciones, etcétera).
Mejoras asistenciales
Mediante la optimización de los recursos humanos y la reorganización de algunos de los puestos de desempeño, se han llegado a cubrir en parte las carencias existentes en el servicio sin un coste añadido. En ese sentido, las medidas adoptadas y la reorganización de los profesionales han consistido en una disminución de personal en cocina (se externaliza el servicio a una empresa que compra la comida más barata al por mayor) que pasa a reforzar el servicio de apoyo a las auxiliares en planta, necesario por el incremento de la dependencia de los usuarios; un servicio de enfermería y control de la medicación diario de lunes a sábado; y mayor cobertura de las actividades psicosociales, pasando de realizar manualidades, animación o ejercicios sólo por las mañanas, a hacerlas también por las tardes.
Otras medidas adoptadas de ámbito estructural para la optimización de los recursos y del servicio han sido: la conversión de algunas habitaciones individuales en dobles para incrementar el número de plazas; reubicar a residentes, acercando a los más dependientes más cerca de las auxiliares para evitar pérdidas de tiempo en desplazamientos; o la mejora de detalles en actividades como la siesta o las duchas.
También se han adoptado medidas de seguridad ante posibles salidas incontroladas de los usuarios con demencia; se ha cerrado el comedor de sacerdotes de Urbieta de lunes a viernes, pasándose a prestar un servicio diario en la vivienda de Urdaneta; se ha abierto una nueva vivienda en Irún para tener más plazas para curas autónomos; se ha implantado una nueva herramienta informática de gestión, eliminando el papel para gran cantidad de trámites; y se ha impulsado la formación de los profesionales en la aplicación de nuevos métodos de trabajo que buscan mejorar la efectividad del servicio, su calidad y disminuir los tiempos.
Próximas líneas de actuación
Lejos de conformarse con el trabajo realizado, Hurkoa seguirá implementando nuevas acciones en la medida en que vaya incrementando el nivel de dependencia de los sacerdotes. Se va a actualizar la evaluación de los riesgos de los puestos de trabajo, adoptando las medidas preventivas oportunas e implantando el nuevo Plan de Autoprotección; se va a fomentar el uso de la grúa para evitar mermas de salud; se van a optimizar y adecuar los recursos de lavandería;y se va a incluir un servicio de teleasistencia para los sacerdotes autónomos de los centros de Urdaneta e Irún, que no disponen de auxiliares las 24 horas.