Imagen
12, Septiembre 12
De entre todos los actos que celebró Hurkoa en 2010 para conmemorar su vigésimo aniversario, tres destacaron por encima de los demás. El primero de ellos tuvo lugar poco antes del mes de noviembre, el de su cumpleaños, en un encuentro con los principales medios de comunicación guipuzcoanos que sirvió para difundir en el Territorio los principales hitos de la Fundación en sus años de existencia, así como las problemáticas a las que ha tenido que hacer frente, los avances conseguidos o sus retos de futuro, entre otras cosas.
Así, explicó que ha atendido a cerca de 1.500 personas dependientes en sus 20 años de historia, que ha asesorado, orientado y acompañado en este tiempo a más de 2.500 familias de Gipuzkoa, y que entre sus objetivos se marca consolidar la nueva delegación abierta en Arrasate y, a medio plazo, extender su presencia a la comarca del Goierri y del Bidasoa, para acercar sus servicios lo máximo posible al ciudadano, así como refrendar su apuesta por la calidad de los mismos. Además, reclamó más recursos para atender la enfermedad mental y juzgados especializados para valorar las tutelas e incapacidades.
Estos fueron precisamente algunos de los temas que centraron su jornada bienal de noviembre, en el que la Fundación reunió a un buen número de expertos para debatir sobre la reforma legislativa y la valoración de la capacidad, dos de los asuntos que más preocupan en el ámbito de la tutela en este momento por la repercusión que podrían tener a corto plazo en el sector. En el acto inaugural de la jornada, la entonces diputada foral de Política Social, Maite Etxaniz, subrayó la necesidad de ser “lo suficientemente flexibles, rápidos e innovadores” para poder dar respuesta “a las nuevas necesidades que se planteen por parte de las personas que requieran ser tuteladas”.
Finalmente, Hurkoa organizó una comida para agradecer a sus miembros su contribución “a cumplir este sueño”, en el que homenajeó a cerca de un centenar de trabajadores y voluntarios “por su entrega y vocación de servicio” hacia las personas desprotegidas, y en el que les pidió que no pierdan “el espíritu que le ha hecho crecer y convertirse en un centro tutelar referente que siga trabajando en red”.
Centro de Día
El Centro de Día de Hurkoa también quiso hacer partícipe a toda la sociedad guipuzcoana de su 25 aniversario el pasado año. En esta ocasión los medios de comunicación invitados trasladaron, entre otras cosas, que en este cuarto de siglo ha atendido a más de 1.200 personas dependientes; que se trata del Centro más antiguo de este tipo en Gipuzkoa y el que dispone de más plazas, con un nivel de ocupación actual del 99%; que garantiza valor añadido con el mayor abanico de servicios y programas, planes de atención personalizados y certificados ISO y EFQM; y que el nivel de satisfacción de los usuarios y sus familias es de un 9,3 sobre 10 de media en los últimos años, que el 100% recomendaría el Centro a otras personas y nadie ha causado baja por trasladarse a otro lugar.
Asimismo, explicaron que el Centro de Día encara los próximos años con el reto de consolidarse como referente en su sector, apostando por la innovación en servicios y por la mejora continua, para mantener así el alto grado de satisfacción de sus usuarios. En este sentido, hay que recalcar que cada año programa para ellos cerca de cuarenta actividades ‘extra’ que complementan a la oferta de servicios que ya presta habitualmente en su labor diaria.
Ese mismo día Hurkoa organizó un acto de reconocimiento a las instituciones que han colaborado más activamente a que el éxito del Centro de Día sea una realidad. El entonces diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y el obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, descubrieron una placa conmemorativa que rinde homenaje a la Diputación Foral, a Gipuzkoa Donostia Kutxa y a Cáritas de Donostia, por su contribución, compromiso e implicación con el Centro en todos estos años.
Este agradecimiento se trasladó también a los trabajadores y voluntarios que han dedicado “toda una vida” a dar un servicio de calidad a los usuarios, para los que se organizó una comida de homenaje “por construir el mejor Centro de Día”. Y es que, algunos de ellos desde el primer día, han hecho posible, con su esfuerzo y dedicación, que el Centro de Día haya alcanzado sus bodas de plata siendo un claro referente en Gipuzkoa.
Entre el resto de actos conmemorativos programados el pasado año, cabe recordar la excursión anual organizada para los usuarios en un destino especial: el Santuario de Arantzazu, lugar de referencia en la historia vasca, ubicado en el espectacular Parque Natural Aizkorri-Aratz. El plan programado para esa jornada por la dirección del Centro de Día fue del agrado de las 61 personas que se apuntaron a la actividad, que terminaron con “muchas ganas de volver a disfrutar de la excursión el año que viene”.
Por último, y como colofón final, el pasado mes de diciembre los cocineros Juan Mari Arzak y Andoni Luis Aduriz visitaron a los usuarios, trabajadores y voluntarios del Centro, charlaron con ellos, y les hicieron partícipes de un coloquio magistral en el que se abordaron diferentes temas relacionados con el ámbito de la alimentación, enfocada principalmente a la tercera edad.
